Las flores de saúco se utilizan desde hace mucho tiempo en la medicina tradicional europea. Las bayas de saúco también se utilizan para conservar, hacer vinos, platos de invierno y para dar sabor y color a otros vinos. Las flores de saúco se suelen utilizar para mejorar la salud. Aunque las ramas y las hojas tienen propiedades venenosas, el pequeño tallo que a veces queda en la baya es inocuo.
El té elaborado con flores de saúco puede ser eficaz en el tratamiento de diversas afecciones crónicas de las vías respiratorias altas, como dolor de garganta, tos seca, gripe, bronquitis o traqueitis.
La inmersión en un baño con una decocción de flores puede ser útil en el tratamiento de la poliartritis reumatoide y gotosa. El saúco, por sus propiedades curativas, ayuda a mejorar el metabolismo.
Los beneficios para la salud de esta planta incluyen la capacidad de tratar infecciones sinusales, gripe, resfriados, irritaciones cutáneas, estrés, alergias y otros trastornos respiratorios. El saúco se utiliza como diurético auxiliar e incluso puede aliviar algunas reacciones alérgicas al polen. Con tal cantidad de beneficios para la salud, he aquí unas cuantas razones por las que merece la pena tener esta valiosa planta en tu arsenal de hierbas medicinales.
